Para sorpresa de los invitados al Grand Palais Éphémère, Chanel inauguró su desfile de alta costura primavera-verano 2022, con la ayuda de la sobrina del Príncipe Alberto de Mónaco, Charlotte Casiraghi, quien también es amazona de competición.
Con una chaqueta de lentejuelas de Chanel y un casco negro, Casiraghi salió a caballo, trotando por la pasarela acompañada por una actuación en directo del músico Sébastien Tellier.
MONTANDO EN ALTA COSTURA
Casiraghi, que también es nieta del icono de Hollywood Grace Kelly, se convirtió en embajadora de la marca Chanel en 2020, tras haber desfilado anteriormente para firmas como Gucci y Saint Laurent. Su madre, la princesa Carolina de Hannover, era muy amiga del difunto director creativo de Chanel, Karl Lagerfeld.
En un vídeo promocional producido antes del desfile, Casiraghi dijo que el uso de caballos estaba en línea con la historia de Chanel y su fundador. “Inmediatamente pienso en la historia de Chanel y Gabrielle Chanel”, añadió Casiraghi. “Es más, los caballos y la equitación han sido extremadamente importantes, si no decisivos, en su visión de la marca“.
El impactante decorado del evento, plagado de objetos geométricos y con lo que Chanel denominó “curvas ecuestres“, fue diseñado por el artista francés Xavier Veilhan. Además, en el vídeo el artista dijo que él y la directora creativa Virginie Viard querían la colección “contrastara con la belleza del jinete y el caballo”.
“También era una forma de alinear la estética tan fuerte del caballo con la de la alta costura, y ver cómo el refinamiento y la animalidad pueden combinarse“, dijo.
RETORNO A LAS VANGUARDIAS DE LOS 20
Tras la espectacular aparición de Casiraghi, el resto de los modelos desfilaron con la colección de Alta Costura Primavera-Verano 2022 de Chanel.
“Es una colección de verano, por lo que es muy fresca, incluso con muchos bordados“, explicó la directora artística de Chanel, Virginie Viard. “Me inspiré un poco en los años 20: las plumas, los flecos, el lado femenino de los constructivistas, la chica que hay dentro”.
El ambiente Gatsby de los años 20 y 30 del que hablaba Viard se puso de manifiesto en los vestidos de gasa y organza con dobladillos desiguales (altos en la parte delantera y bajos en la trasera). Los paneles de pañuelos que caían desde los hombros hacían referencia a un recurso de Coco Chanel de la época.
Por su parte, los vestidos de noche de satén parecían estar suspendidos de collares y se cubrían para dejar al descubierto la espalda. Los pequeños chalecos de cuentas podían ponerse para aumentar el glamour.
Sentados en primera fila para ver el espectáculo estaban varias celebridades y la élite de la moda, como Anna Wintour, Pharrell, Margot Robbie, Sofia Coppola, entre otros. chanel.com